Darle un sabor único a tus barbacoas será muy sencillo gracias a este ahumador de carne. Con él podrás darle un toque inigualable a tus carnes rojas, aves y pescado.
Aprovecha todas las ventajas que ofrece, con respecto a otros ahumadores de carne, para cocinar de una forma diferente. Y con el que darás a tus comensales, la oportunidad de que prueben en su paladar nuevas sensaciones.
Ahumador
Es sabido que muchos años atrás se usaba la técnica de ahumar la carne para que ésta pudiera conservarse en buen estado durante más tiempo. Pero en la actualidad, son cada vez más personas las que disfrutan del sabor que se puede conseguir gracias a los ahumadores de carne. Es por ello, que si disfrutas innovando y probando cosas nuevas en la cocina necesitas uno para ti. Para que tu ahumador de carne tenga una mayor vida útil y un buen funcionamiento a lo largo de la misma, lo primero que deberás hacer es curarlo. Esto implica que antes de comenzar a cocinar nada en él, debes encenderlo hasta que alcance los 200 grados y luego dejarlo que baje a 100 y así poder ahumar durante las horas que sea necesario. Es entonces cuando se habrán eliminado lo contaminantes y podrás añadir los condimentos que desees.
El siguiente paso a seguir durante el proceso de ahumar la carne tener preparadas las astillas de madera o el carbón que emitirán el humo que dará el sabor característico a tu comida. En cuanto a las astillas de madera se pueden encontrar de diversos tipos como roble, aliso, manzano, nogal y cerezo. Como hemos dicho, el humo emitido se impregnará en la carne, es por ello que se debe comprobar que ya sean las astillas o el carbón no contengan sustancias químicas. Puesto que de ser así, los gases de los químicos se adherirán a la carne. Para evitarlo, en el caso de las astillas es recomendable remojarlas previamente en agua.
En cuanto a las astillas o el carbón es muy importante tener una buena cantidad ya que, la cocción se realiza durante muchas horas. Y en las mismas, se necesitará ir recargando progresivamente la cámara del ahumador de carne para que siga emitiendo calor. Por ello, si es la primera vez que vayas a usarlo te recomendamos que tengas una alta cantidad de astillas o carbón. Posteriormente cuando tengas más conocimiento del gasto que implica sabrás organizarte mejor.
Ahumadores de carne
Otro punto a tener en cuenta incluso antes de adquirir tu ahumador de carne es el lugar en el que podrás ubicarlo en tu jardín. Este aspecto es de gran importancia y para evitar que suceda cualquier incidente es recomendable que se ubique lejos de árboles o de la propia casa. Puesto que depende de hacia dónde vaya el aire se puede provocar fácilmente un incendio que ponga en riesgo la salud del cocinero y del resto de comensales.
Una vez que vayas a proceder a ahumar la carne y encuentres la receta que más te guste para aderezar la carne te recomendamos, que la guardes en un recipiente ya sea de plástico o vidrio durante un día. De esta forma, conseguirás que la carne tenga más sabor además del propio ahumado.
Una vez que vayas a proceder al encendido de tu ahumador de carne, deberás tener en cuenta que haya aire alrededor de las astillas de madera o el carbón. Esto es necesario para alcanzar la temperatura deseada durante el ahumado. Es necesario abrir los conductos de ventilación al máximo, para que una vez que se haya alcanzado una elevada temperatura, de unos 200 grados, ésta vuelva a bajar. Es recomendable que se tenga una temperatura de entre 80 y 135 grados. La elección de una u otra temperatura dentro de este intervalo, dependerá tanto del tipo como el tamaño de los trozos de carne, como del tipo de ahumador de carne en sí. En el caso de la carne, es lógico que un trozo de hombro de cerdo requiere un fuego más alto que la carne de pescado o la carne deshidratada. Por su parte, en el caso del tipo de ahumador hay que tener en cuenta que los eléctricos o a gas suelen alcanzar una temperatura más alta, por lo que habrá que bajar la temperatura del fuego.
Comprar ahumador de carne
Para sacarle el máximo partido al comprar ahumador de carne, en relación al tiempo y a la temperatura de ahumado de los alimentos debes ser consciente de que es un aspecto que mejorarás a base de ensayo y error. Por ello, a base de pruebas en relación a la cantidad de combustible, el condimento a utilizar y el tiempo de cocción, encontrarás el método que más se adecúe a tus preferencias. Teniendo como base siempre esta premisa, durante el proceso de ahumado la carne sólo deberás revisarla un par de veces como máximo. Puesto que cada vez que abres el ahumador de carne, el calor se escapará. Sin embargo, como ya se ha comentado es importante que el combustible sí sea revisado por si debe ser reemplazado.
Como consejo, especialmente para las primeras veces que uses tu ahumador, te recomendamos que compruebes el estado de la carne una hora antes de que hayas programado sacarla. De esta forma, te asegurarás no pasarte de cocción ya que, es preferible sacarla antes y volverla a meter para terminar de cocinarla, que sacarla directamente más hecha de lo necesario. Una vez verificado que el alimento está bien cocinado, podrás retirarlo de la rejilla del ahumador de carne. Es importante que recuerdes, que depende del tipo de madera que hayas usado como combustible, es posible que se le haya dado un toque más rojo a la carne y sea más complicado saber si está en el punto de cocción adecuado.
De cualquier forma, ve probando diferentes formas de conseguir tu carne ahumada perfecta ya sea con el marinado o con el propio ahumador, teniendo siempre en cuenta las pequeñas diferencias que pueden existir entre unos y otros. No debes olvidar, que debes ser paciente en este tipo de cocción, y de esa manera los resultados logrados serán mucho más satisfactorios y querrás repetirlos cada vez que tengas una reunión social.